Madrid, 5 de febrero de 2024. En relación con la figura de Carmen Martín Gaite, La tristura ha destacado que se parecen a ella «en algunas cosas, y eso nos alegra; buscamos siempre, hablamos y escuchamos, intentando generar esa situación sencilla pero trascendente para comprendernos mejor». No obstante, si ella aún estuviera aquí «no haríamos esta obra». Y es que, según han explicado, «Carmen Martín Gaite pasó toda su vida buscando a su interlocutor, alguien con quien poder seguir pensando, escribiendo, imaginando. Le obsesionaba el habla de las personas, perseguía sin descanso esa conversación siempre deseada. Sus personajes buscaban comprensión, buscaban amor, exponían su fragilidad y su fortaleza, trataban de sentirse menos solos».
Para Fernando Jariego, «conocer a Carmen Martín Gaite a través de La tristura está siendo increíble. Yo no la conocía antes de hacer la audición. pero descubrir su universo, todo lo que abogaba por la conversación, por encontrar un interlocutor en el otro, es muy bonito, y da un punto de partida muy interesante para esta obra, que habla precisamente de eso. Además, es una obra tierna, loca, sensible. Con ocho jóvenes que, principalmente, hablan de la muerte, algo que yo no me habría planteado con la edad que tengo. Pero es revelador. Es crear en directo algo que creo que va a sorprender a todo el mundo», avanza.
Por su parte, para Marcos Úbeda «lo que más emociona de Así hablábamos es que parece plantear una solución que, desde luego, no es nueva, pero se siente como tal, se siente fresca. Y es que si bien la obra incide en la historia de los personajes, y les da la importancia y el lugar que les corresponde, siento que se centra más en los procesos a través de los cuales llegamos a esos conceptos, y siento que eso es un punto muy cálido de partida, es desde donde tenemos que empezar a hablar».