En marzo, el Centro Dramático Nacional apuesta por la tradición oral y el baile como formas de relacionarse - Centro Dramático Nacional

En marzo, el Centro Dramático Nacional apuesta por la tradición oral y el baile como formas de relacionarse

 

El #Dramático presenta este mes la producción Obra infinita, de Los Bárbaros, quienes protagonizan además una Carta Blanca sobre el papel que cumplen los cuentos

Además, el ciclo +Dramas trae Los que bailaban, de Amaya Galeote, que pone el foco en esa generación que se enamoró moviendo sus cuerpos al ritmo de la música

Para el público familiar, contaremos con una nueva entrega de Titerescena –Una historia boca abajo– y una nueva convocatoria del Taller de conciliación

Madrid, 28 de febrero. El Centro Dramático Nacional (CDN) presenta en marzo el estreno absoluto de Obra infinita, una producción sobre los cuentos populares, las canciones, las memorias y las oralidades creada por Los Bárbaros. Precisamente, este tándem, formado por Javier Hernando y Miguel Rojo, protagonizará la próxima Carta Blanca de nuestra Acción Dramática, que, además, trae una nueva sesión del ciclo +Dramas, titulada Los que bailaban, en la que la coreógrafa Amaya Galeote nos sitúa frente a la pregunta de si alguna vez hemos visto bailar a nuestros padres.

En cuanto al público familiar, tiene una cita con Titerescena, que lleva al Teatro Valle-Inclán Una historia boca abajo, espectáculo producido por La Baracca con dirección de Andrea Buzzetti que muestra cómo se enriquecen los puntos de vista cuando se cruzan, al generar una nueva dimensión compartida. Además, prosiguen los talleres de conciliación, que se llevarán a cabo en las cuatro obras que estarán en cartel a lo largo de este mes, y se presentará el libro de la obra 400 días sin luz en un Dramawalker en Cañada Real.

“Escuchar es un acto de comunidad que requiere un lugar, tiempo y silencio”. Esta cita es de la escritora Ursula K. Le Guin y les sirvió a Los Bárbaros como piedra angular para escribir y dirigir Obra infinita; el lugar al que aludía la autora estadounidense será la Sala de la Princesa del Teatro María Guerrero, y el tiempo, el 3 de marzo, cuando comenzará a representarse esta producción del CDN en la que un elenco coral nos recuerda la importancia de contar historias, de cantar, de cuidar y curar con palabras en torno a una hoguera. Los cuentos populares que atraviesan los siglos y se atreven a imaginar el futuro se convierten en el hilo conductor de esta obra repleta de posibilidades, de relatos disidentes, de momentos especiales en los que la escucha crea comunidades y nos acerca la propuesta de una vida juntos. Podremos disfrutarla hasta el 2 de abril.

Y, además, el 13 de marzo, los autores moderarán en la Sala El Mirlo Blanco, del Teatro Valle-Inclán, la Carta Blanca ¿Para qué sirve un cuento? Maneras de alimentar el fuego, en la que participarán el escritor, ensayista y guionista Santiago Alba Rico, el cuentacuentos Pep Bruno, y Sandra Araguás, especialista en tradición oral. Mantendrán un diálogo acerca de la memoria, la construcción de imaginarios y colectivos gracias a los cuentos y las canciones, y la necesidad de volver a confiar en los relatos, pensarlos y construirlos juntos, ya que se trata de un gesto fundacional de la cultura.

“Soy bailarina y nunca había visto bailar a mis padres”. De esa premisa parte Amaya Galeote para montar Los que bailaban, una entrega de +Dramas coproducida por el CDN y Sanra Produce en la que sumerge al espectador en una investigación que arranca en el salón de sus padres para luego asomarlo a otros muchos e ir tejiendo una mirada en torno a la emoción y los recuerdos a partir de esa generación que se relacionaba desde el cuerpo y que se enamoró bailando. Podrá verse en la Sala El Mirlo Blanco del 1 al 5 de marzo.

Titerescena y conciliación

Y ocurre que, a veces, esas historias de las que hablan Los Bárbaros se dan la vuelta. Por ejemplo, sucede en Una historia boca abajo, nueva entrega del ciclo Titerescena, dirigida por Andrea Buzzetti y escrita entre ella, Enrico Montalbani y Carlotta Zini. Esta producción de La Baracca trae a dos personajes que viven en pisos diferentes, se mueven en lados opuestos y observan las cosas desde distintos prismas, imbuidos en su propia rutina llena de certezas pero también de miedos y de la curiosidad de encontrarse con otros. El nexo de unión para que crucen sus puntos de vista tomará la forma de un simple gato rojo que se fuga y que les conducirá a emprender un viaje repleto de descubrimientos y sorpresas, hasta que creen una nueva dimensión compartida donde disfrutarán de su mutua compañía. Estará en la Sala El Mirlo Blanco el 11 y 12 de marzo en sesión doble.

Además, se han organizado dos nuevos Talleres de conciliación, que cubrirán las cuatro obras que estarán en cartel a lo largo de marzo. Así, Cada teatro, un refugio tendrá lugar el día 18 durante la función de Fundamentalmente fantasías para la resistencia, y el día 19 se desarrollará a la par que Los pálidos, mientras que Todos los rincones del teatro se simultaneará el 25 de marzo con El proceso y, el 26, con Obra infinita. El primero lo acogerá la Sala El Mirlo Blanco, y el segundo, la Sala Margarita Xirgu del Teatro María Guerrero.

Por último, Acción Dramática propone el 12 de marzo la presentación del texto de la obra 400 días sin luz, de Vanessa Espín y dirigida por Raquel Alarcón, que se exhibió en el Teatro Valle-Inclán el pasado otoño. La presentación irá precedida de una muestra de algunas de las historias que componen el proyecto Dramawalker Cañada Real, a través de un paseo guiado por su coordinadora artística, Raquel Alarcón.