Inspirada en el estallido social en Chile de 2019, esta obra de Marco Layera nos invita a reflexionar sobre la naturaleza de la violencia
El montaje sigue la estela del teatro político y provocador que caracteriza el estilo de la compañía, quien ya deslumbró en España con Paisajes para no colorear (2019)
La coproducción germano-chilena se estrenó en la Schaubühne de Berlín y, tras su paso por diversos festivales europeos, podrá verse en Madrid en cuatro únicas funciones, del 13 al 16 de abril en el Teatro María Guerrero